¡Hasta cuando la discriminación en contra del Inmigrante!

Por Christian Terreros León

Es incomprensible saber que todavía no hay leyes totalmente establecidas que respalden en su totalidad  al inmigrante latino, hispano, mexicano; a hombres y mujeres trabajadores que ayudan al progreso en los Estados Unidos, buscando forjarse un futuro promisorio  sin hacerle daño a nadie. Personas que muchas veces son maltratados especialmente discriminados por su origen  étnico, social, y casi siempre son abusados laboralmente. No existen mecanismos radicales frente a un abuso y acto de discriminación frente a un inmigrante latino o hispano sea, cual fuere su condición (documentado o indocumentado).
La Discriminación del inmigrante, especialmente el latino/hispano/ mexicano/ México- Americano está casi siempre en la vista de todo el mundo, de toda la sociedad. Con un “wink-wink” nos hacemos de la vista gorda lo que sucede en nuestras narices, lo que sabemos que está pasando, pero a su vez “no vemos”. Situaciones que suceden en entidades laborales, donde el empleador contrata al inmigrante porque “dis’que” somos trabajadores, sin embargo la realidad es que nosotros los inmigrantes, ofrecemos mano de obra “barata”. Porque hacemos el trabajo que muchos miembros de la comunidad tradicional se niega a realizar. En el aspecto educativo, la discriminación está al alcance de nuestros hijos, de nosotros mismos, sino preguntémosles; y eso de que se preocupan de la educación de las minorías “yeah, right” como dijeran ciertos amigos por ahí; no señores, se preocupan en gastar dinero en la comunidad inmigrante porque así los obligan las fundaciones que les dan dinero para que trabajen en diversidad, en inclusión, en integración; como dirían en mi pueblo “ no es amor al chancho (puerco) sino al chicharrón”. La lista de sectores donde somos discriminados puede seguir, como en el aspecto de salud, sino fíjense en las áreas rurales donde los hospitales no tiene a un intérprete porque dis’que no hay suficiente población Hispana- latina que justifique el gasto.; y así el aspecto social, vivienda, etc.

El otro día por ejemplo conversaba con un amigo que quería rentar un local para su propia empresa en Omaha, y ¿Que creen? La empresa que rentaba al escuchar su acento tuvo que decir que ya estaba rentado. Cuando mi mismo amigo le pidió a su cuñado, un americano caucásico él, que por favor llame a la misma empresa para que pregunte por el mismo local, le contestaron amablemente y le dieron hasta una cita. Año 2016, ¡y aun suceden estas barbaries!
El latino, hispano no podemos caminar como un ciudadano común y en varias oportunidades se siente el maltrato y abuso con nuestra comunidad, muchas veces nos incluyen y relacionan con criminales o gente de malas costumbres o de mal vivir por las mismas autoridades que son las que en ellas recae dar un buen ejemplo de igualdad y tolerancia entre todos los miembros de una misma región; sin embargo es lamentable ver como existen calificativos al ciudadano latino de manera deplorable y humillante por su apariencia.
Ahora, con estas líneas no se trata de empezar un nuevo movimiento pseudo-político, alarmante, o amotinante, ni mucho menos. Lo que se quiere dar a conocer en estas líneas es que nosotros no nos podemos hacer los de la vista gorda, que nosotros no podemos callar ante el maltrato y que nosotros no podemos agachar la cabeza porque no hemos hecho nada malo sino trabajar para subsistir y para mover la economía del país. El espíritu revanchista esta demás; sin embargo lo que si es necesario hacer y hacer que nuestros hijos hagan, es salir adelante, no perder el Norte, no perder la razón por la que vinimos a este país, no podemos perder el sentido de nuestra salida de nuestras tierras, de nuestros ranchos, de nuestras ciudades. Nosotros vinimos a salir adelante y no darle todo a nuestros hijos al punto de que convirtamos a los mismos en zánganos de esta sociedad realizando actos que nos hacen agachar la cabeza y darles la razón a los incrédulos y discriminadores de nuestra gente. Por favor no puede ser que un padre le diga a su hija “no termine la secundaria porque usted se va a casar” Por favor No puede ser que un padre le diga a su hijo “No termine la secundaria porque en la matanza le pagaran $10 la hora” ¿Cómo es posible? ¿Qué pasa? ¿Para eso vinimos? ¿Cómo es que vamos a parar ese círculo vicioso de discriminación sino demostramos que somos mejores que nadie porque estamos capacitados para hacerlo? No nos escudemos en que somos discriminados y que pena, somos víctimas ¡No! Nonos escudemos en ese partido político que dis’que le van a dar papeles ¡No! Esa es politiquería barata y usted no vivió de politiquería barata en su país, ¿por qué lo va a hacer ahora?
Hay demora en establecer leyes más drásticas a favor del inmigrante, ¡Si la hay! ¿Por qué? Porque simplemente es bueno para algunos y súper bueno para otros. Pero su felicidad y progreso no depende de esos cambios, ¿o si? Somos el espíritu emprendedor y fuente de inspiración de nuestros hijos y de varios inmigrantes, sigamos adelante, que él si se puede no es solo para las marchas de inmigración. El SI se puede es para su vida diaria.