“Amo a México y a Estados Unidos” Blanca Mejía, tras recibir reconocimiento de la Comisión de Nebraska para Latinoamericanos y la oficina de Don Bacon

Omaha, NE. El pasado lunes 25 de septiembre se llevó a cabo una emotiva ceremonia de reconocimiento en las instalaciones del consulado de México, para honrar el trabajo que ha venido realizando Blanca Mejía a través de su organización Generation Diamond, misma que, en números anteriores, expusimos a nuestros lectores sobre su significado y el arduo trabajo que hacen día a día y que ha impactado sobremanera a miles de personas a las que ayudan a reintegrarse a nuestra comunidad después de un periodo, cualquiera que este sea, de encarcelamiento; ofreciéndoles así, una segunda oportunidad de mejorar, vivir y encontrar sentido a la vida. 

En lo personal, me sentí muy identificado con las palabras de Blanca al referirse a México como el país al que le debe su raíces y cultura, y a Estados Unidos como su segunda patria que le ha brindado grandes oportunidades para encontrar un balance entre lo que es, de dónde viene y hacia dónde quiere ir. 

“Amo a México y amo a Estados Unidos”, dijo emocionada sosteniendo las dos banderas con orgullo. “Llegué a este país con una mochila llena de sueños. Comencé como muchos, con miedos e inseguridades, con la barrera del idioma, pero siempre tuve muy claro que quería hacer algo grande, algo que pudiera ayudar a otros y así fue. Un día, después de varios años de arduo trabajo y de no estar conforme, decidí que era hora de hacer algo que no solo me hiciera sentir bien a mí, sino que pudiera ayudar a personas a reivindicarse. No ha sido fácil, es un trabajo arriesgado, pero he tenido la fortuna de encontrarme con personas, con historias que siempre me recuerdan a mi yo llegando a este hermoso país con una mochila llena de sueños. Y eso es lo que no debemos de olvidar; todos tenemos sueños y muchas veces hacemos a un lado a las personas a las que ayudamos por el prejuicio que existe sobre ellas al haber estado en prisión. Todos merecemos una segunda oportunidad y el ayudar a otros a que encuentren su camino me hace feliz”, compartió en profunda emoción. 

Al evento acudieron múltiples líderes comunitarios como el senador Tony Vargas, Gina Ponce de la Universidad de Bellevue, el cónsul general de Guatemala, Billy Muñoz, así como el vicecónsul Ricardo González. Abbiut Arcos en representación de Danza Raíces de México, Karen y Ross Pesek, Maru Whitmore y Guadalupe Arriaga de la Comisión de Nebraska para Latinoamericanos, el congresista Don Bacon quien dedicó unas palabras a Blanca Mejía frente a los presentes y entregó un merecido reconocimiento, mismo que hizo público frente al congreso de los Estados Unidos, Yesenia Valenzuela en representación de la alcaldesa Jean Stothert, Itzel Lopez de AIM institute, Rita Rodriguez de Monarkia Institute, un servidor Oswell Reza en representación de Mundo Latino y La Nueva Radio, entre muchos otros miembros reconocidos y distinguidos que ocasionaron el esfuerzo y dedicación a la pasión que Blanca ha puesto en esta valioso labor. 

“Blanca es una inspiración para muchos, está haciendo algo importante, algo que es de admirarse y nos da mucho gusto ser testigos de este acontecimiento importante para ella y para nosotros como latinos. Ella es un ejemplo de esperanza, de valentía y de superación al igual que su familia que tanto la apoya. Muchos deben de conocer su historia e inspirarse a hacer cosas grandes para que puedan encontrar su propia grandeza”, comentó el cónsul de México Jorge Ernesto Espejel.

Felicidades nuevamente a Blanca, a su familia y a todos los presentes por apoyar su trabajo, reconocerlo y seguir fomentando la continuidad del mismo. Me disculpo con aquellos a quienes no he nombrado, pero que estuvieron presente siendo testigo de esta tarde conmovedora en la que aplaudimos el éxito de una compatriota que está cambiando para bien, la vida de muchas personas que solo necesitan una oportunidad más. ¡Enhorabuena!