Miles de mexicanos se alistan para viajar al país azteca frente a la llegada del último mes del año

Como cada año, la caravana de migrantes que parten de Estados Unidos a México para viajar seguros en las fiestas realizará una salida en próximas fechas, mismas en las que, principalmente, se pretende pasar las vacaciones decembrinas con los familiares que residen en el país vecino. En este sentido, decenas de residentes mexicanos en el estado de Nebraska se preparan para partir con los miles de connacionales más que se darán cita el próximo 15 de diciembre a las 5 am en la Sames Auto Arena, en el 6700 Arena Blvd., de Laredo, Texas. Gabriel Castañeda, uno de los tantos migrantes que desde hace varias semanas ha estado haciendo los debidos preparativos, nos comenta que la ya tradicional caravana que este año celebra 15 años de llevarse a cabo, ha sido toda una experiencia que ha venido realizando desde hace 5 años. 

“Al principio no quería hacerlo, es decir, no porque no quisiera unirme a ella, sino por los contras que también implica ir con demasiada gente al mismo tiempo. Especialmente en la frontera que es en donde se hacen largas filas, principalmente cuando uno viene de regreso, pero creo que te acostumbras. Además, conoces a mucha gente, haces nuevas amistades. Algunos nos vamos ya en caravana desde aquí de Omaha y llegamos a Laredo para partir con miles de personas más. Es emocionante, es toda una aventura, pero sí hay que ir con la mejor actitud y bien cargado de pila, un buen copiloto y mucho café”, comentó. “Mi familia no siempre estuvo de acuerdo, mis hijos solían decir que preferían irse en avión, pero saben que si quieren hacer eso deben de ahorrar y pagar el ticket ellos mismos porque no es nada barato. Mi mujer, al igual que yo, ya nos acostumbramos a estos viajes porque nos vamos preparando mentalmente. A mí siempre me ha gustado manejar largas distancias. Fui trailero muchos años, así que no me es pesado, pero la primera vez que hicimos ese viaje desde aquí hasta Puebla, casi nos regresamos a medio camino, pero como te dije uno se acostumbra. Los niños se duermen o van en sus dispositivos viendo películas, jugando, etc.

Tratamos de ir lo más cómodos que podamos porque hemos aprendido de las malas experiencias”, enfatizó, “Recuerdo que la primera vez nos fuimos todos apretados, llevábamos muchas maletas y cajas de cosas que quisimos llevar a nuestras familias. El peor error fue que no nos organizamos bien y fue muy incómodo. Hoy ya no batallamos de ese modo, yo creo que hasta nos gusta porque nos vamos lo más ligeros dentro de la Van y todo lo demás se va en la parte de arriba bien atado y cuando llevamos cosas extra lo ponemos en la canasta de carga que va remolcada por el vehículo. Tratamos de no gastar en cada parada, pero ya sabes, a los niños siempre se les antoja algún dulce y hay que aplacarlos para que vayan contentos. Mi esposa siempre prepara algo de comer o durante el camino va preparando para todos diferentes cosas para calmar el hambre.

Creo que lo más emocionante de cada viaje es saber que vas a ver a tus seres queridos a quienes tienes mucho tiempo que no has visto, pero también hay cosas feas porque ves de todo, desde personas que se quedan en el camino porque ya no les funcionó el auto, hasta accidentes mortales y es triste pensar que esas personas que iban con esa ilusión no volverán a ser vistas, por eso hay que ir con mucha precaución, con cuidado y siempre alerta. Si uno no puede manejar lo mejor es pararse y descansar, o que alguien más que esté capacitado para hacerlo te ayude en el camino, porque al final de cuentas es una gran responsabilidad ir al volante con carro lleno, pero el viaje pesado y, a veces largo, vale mucho la pena”, concluyó.

Y así como Gabriel y su familia, miles más se unen a la emoción de poder realizar este viaje a sus tierras natales, mientras que miles más ven con ojos de anhelo algo que posiblemente algún día podrán hacer con total libertad y gozo de reunirse con aquellos a quienes dejaron un día, pero que jamás olvidaron.